¿Tiene pensado lanzarse a comprar una casa? Estas son 10 cosas que sería muy recomendable que tuviese en cuenta antes de hacerlo:
1. Comprobar el titular registral: Es importante comprobar mediante una nota simple que quien nos está vendiendo la casa es el propietario real y legal de la vivienda
2. Comprobar el estado de cargas de la vivienda, es decir, si tiene alguna hipoteca, embargo o carga de cualquier otro tipo
3. Comprobar el estado de la inspección técnica de edificios (ITE): es obligatoria para los inmuebles de más de 20 años de antigüedad y se debe de realizar cada 10 años
4. Conocer la cuota de la comunidad de propietarios: se paga en función del porcentaje de la participación que nos corresponda del total del edificio. Saber los gastos de la comunidad de propietarios que vamos a tener que soportar, qué incluyen y si el propietario anterior está al día
5. Averiguar si hay obras previstas en el edificio, tanto las ya aprobadas como las pendientes, pues de ellas dependerá las derramas que tengamos que afrontar en el futuro
6. Averiguar si hay denuncias en el ayuntamiento. No es muy habitual, pero convendría saber si existe alguna denuncia de algún vecino.
7. Averiguar sobre el vecindario y los estatutos. Es importante saber si los vecinos están al corriente de los gasto de comunidad y/o derramas, y no encontrarnos con una comunidad en bancarrota , además de conocer los estatutos de la comunidad por si prohíben y si admiten o no, por ejemplo, la tenencia de animales.
8. Comprobar el estado general y particular de la fontanería, electricidad y bajantes. Es recomendable probar la presión de los grifos, ver si el cuadro de la luz es ya moderno, si existen contadores individualizados y el estado de las bajantes. Nos ahorrará futuras sorpresas.
9. Conocer el valor mínimo de venta que marca la comunidad en la que se encuentra el inmueble, dado que de ello se deriva el impuesto que se genera el ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales), sobre todo si el precio de la compra fuera inferior a éste.
10. Tener en cuenta la capacidad de pago y los gastos que se generan con la compraventa. Tanto si compramos al contado como si solicitamos una hipoteca, tendremos que añadir los gastos accesorios a la compra, y en el caso del préstamo hipotecario, además la cuota mensual que tendremos que afrontar más los gastos de la constitución de la hipoteca